jueves, septiembre 21, 2006

ha amanecido

Ha amanecido un aire gris y ceniciento,
como si fuera el último hijo de la noche,
la última esencia que escapa
a su tiempo.
La negra noche, aún quería seguir,
el verde viento la ha dispersado.
Y como por encanto
la catarata de colores,

que anuncia una mañana
Se ha reducido al gris.

El universo está ahogado.

te amé

Te amé sin que yo lo notara
En geografías contrarias y regiones equivocadas,
En mediodías olvidados, y en noches derramadas,
En aromas de lluvias recién caídas
Te amé sin que yo lo notara.
Entre el viento y las estrellas quebradas
Entre mi silencio y el sereno sonido de tu risa
Entre nocturnas fronteras selladas
Te amé sin que yo lo notara

Y te amé sin que yo lo advirtiera,
Sin que lo distinguiera.
Viéndote sin buscarte
Y hablándote sin llamarte
Porque en el amor no valen los ojos cerrados
Porque en el amor no sirven los labios partidos
Entre copas de vino y mas vino, de risas y mas risas
Entre horas volcadas y consumidas
Mi vieja edad te reclama
Ahora que se que te ama.